Practicando aquarunning sin piscina

Pues eso, que empiezo a sospechar que soy gafe. Porque ayer me mojé, pero hoy es que he llegado a casa totalmente calado, como una sopa de verduras. Tocaba salir a rodar suave -media hora- y a las seis y cuarto de la tarde no llovía. Ha sido empezar a correr y me ha caído todo el agua que a uno le puede caer sin nadar... Y otro ejemplo, tras una mañana soleada ha llovido a mediodía (justo cuanto he bajado a por comida, claro).

Pero lo que más me fastidia es que ha sido acabar el rodaje, subir a casa, y ahora ya no llueve... O sea, chicos y chicas, aprovechad ahora que estoy en casa y es matemáticamente imposible que llueva.

Y ya sabéis, mañana los que hagáis la San Silvestre lo que os toca, agua a mares, que yo estaré allí (quien quiera, a las 16.30-16.45 en Padre Damián esquina Concha Espina en el Fridays de la esquina del Bernabeu)

El rodaje bien, mejor de pulsaciones que ayer, aunque siguen siendo algo altas a pesar de que he intentado ir muy despacio, y sin nada de cansancio. Aunque claro, con la lluvia que caía, y teniendo en cuenta que llevo gafas y que era de noche, no he mirado el pulsómetro en todo el rato, y quizás por eso he ido un poco más rápido de lo debido. Todas estas excusas las utilizo para que el Mister Miguel no me regañe ;)

Una curiosidad. Hoy estaba aburrido en el trabajo (se me acabaron las vacaciones y estos días hay muy poco que hacer) y me he entretenido en calcular en Excel de la carrera de Aranjuez cuanta gente salió por delante de mí y acabaron detrás (es decir, gente a la que adelanté durante la carrera), y me han salido 575 corredores. El caso contrario, gente que salió detrás de mí y acabó por delante, adelantándome, menos de 200 corredores... Ya decía yo que los primeros kilómetros parecían más un rally que una carrera. Y eso que había cajones de salida para que no se colara nadie, y que yo soy uno del montón... Os recuerdo que a meta llegaron 3,700 corredores más o menos.